sábado, 17 de marzo de 2012

Casi 7 mil entradas

No hace mucho celebraba que ya llegaramos al umbral de las 5 mil entradas y ahora me encuentro con que estamos a punto de llegar a las 7 mil. Muchas gracias a todos los que sean asiduos a estas banalidades que escribo, que me brindan un poquito de felicidad cada vez que las creo, que las construyo en mi cabeza formando una idea y que al final nacen en palabra, frase y entrada.

Me dedico a la Física. Los últimos años de mi vida han sido de un esfuerzo enorme por alcanzar la maestría en Ciencias, y actualmente terminar mi Doctorado. La UNAM y el Instituto de Física son demandantes. La ciencia lo es. Y por eso le reprocho la atención que exige, la que me prohibe colmarme de los autores, de los textos que me brindan una paz como en ningún otro lado. Esos autores de poesías, de cuentos, de novelas que vuelcan el corazón en cada verso, en cada oración. Y justo esa limitación me impide continuar con mi escritura. ¿Cuántas novelas revolotean en mi cabeza? Cuántos cuentos o poemas, y todos ellos obligados a ser sepultados, a no ver la luz, a volverse "no nacidos' de mi creación.

Empecé este blog hace ya más de dos años por un intento tanto de escribir,  como de permanecer en contacto con mis amigos. Tratar de escribir los aconteceres más relevantes en mi vida, para que ellos se enteraran y, de cierta forma, formaran parte. Con el tiempo, eso se fue transformando, y se convirtió en el rincosito donde puedo escribir y mostrar a todo mundo lo que siento, sea un soneto, un pensamiento, lo que me hace feliz o me encabrona. Notas periodísticas, el triunfo de la selección, cualquier cosa se ha convertido en 'algo más' aquí. Desde los vulgares y simples links hasta los YagoVersos, que tanto me colman de dicha, aunque sean los menos visitados. Me resulta increíble que de todas las entradas que tengo, la más visitada sea la titulada Tres historias Gays. Jeje estoy seguro que este blog es el menos gay de todos los blogs con tendencia gay de la red. Es tan poco gay, que estoy seguro que ni es gay. Pero a la comunidad lo que pida, igual en un futuro escribimos algo más gay, no se, como la historia de mi vida o la de Francis, jeje. Casi son idénticas, salvo que Francis fue famoso.

Estamos en marzo, comenzando la primavera. Las flores florecen, los verdes campos reverdecen, los cielos azules "azulecen", y mi alergia crece. Mi nariz se costipa, me lloran los ojos; mocos, tos y estornudo mis acompañantes diarios, mi garganta se cierra y mis ojos no soportan la luz. En los peores momentos una brutal comezón de paladar, de oído y de barba me atacan juntas, coordinadas, y todo se corona cuando me hincho de la cara como sapo. Debe ser la alergia al polen. O a la felicidad intrínseca de los demás, que trae la primavera consigo, y de la que no soy parte. Prefiero el invierno. El frío helado que traspasa la piel y nubla el pensamiento, que obliga a aceptar cualquier cita con tal de estar cerca de un cálido cuerpo abandonado. Sí, prefiero el invierno, con sus noches largas, con su fin de año inherente, con sus calles colmadas de frío, con la necesidad de las personas de alcanzar redención de cualquier forma, lo más humanamente posible, para olvidar los pecados y tristezas cometidos en un año. Sí, el invierno en el hemisferio norte es lo mejor.

¿Qué reflexión más grande puedo brindar para cerrar esta entrada? Una me llega a la mente. Extraída de un excelente disco, de Alejandro Filio "En directo". Dice así Rogelio Botanz, con quien canta en ese disco en un par de rolas: "Si alguien dijera 'en mi casa no hay paz', salgo en busca de paz, a la casa del vecino, o hasta el último rincón del mundo. Pero si en su casa tuviera paz, no salgo en busca de guerras; perderá la paz y la casa, regados, hasta el último rincón". Y es neto lo que dice. Nadie sale a buscar algo que ya tiene en casa. Podrías perderlo todo por buscar algo más. Chingón!

2 comentarios:

  1. Ya se había tardado una nueva entrada en el blog, muy buena ésta, saludos amigo!

    Lucia V.

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  2. Muchas gracias Lucía! Efectivamente, ya me había tardado. Un abrazo transoceánico!!!

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